Inadvertida
camino entre los bárbaros
que trotan junto a sus perros antipáticos
conectados a iPhones a celulares
y audífonos de toda clase
me miran, pero no ven.
Estampida de búfalos
rubios de ojos sajones
y fieros dientes de plata
bajo sus cascos rodamos
mientras destrozan el mundo
a dentelladas.